miércoles, 27 de febrero de 2008

Porque es mi deber...

... hoy me gustaría hablar de Hijos de Puta, Bastardos, Tios Mierda, Cobardes, Capullos, Genocidas, Cabrones y cuantos apelativos se os ocurran para denunciar y exigir el apaleamiento popular de todos cuantos alguna vez se han cargado a su mujer/novia/amante/divorciada...

Y es que ayer esta peste acabo con la vida de cuatro mujeres. Cuatro en un mismo día. Cuatro vidas, cuatro sueños truncados, familias rotas y niños solos. Tiros en la cabeza, apuñalamientos, asfixias... MUERTES.

Uno se suicido, el otro lo intentó y dos fueron detenidos. Por eso pido que los suelten en el centro de las localidades donde le conocen y que se aplique la verdadera justicia, una justicia que convertiría a estos seres en una especie de masa uniforme de carne que haría vomitar al mismísimo Jack Bauer. Eso es lo que pido, eso es lo que merecen esos Hijos de Puta. Espero que esto mueva conciencias y se apliquen nuevas normativas para prevenir y condenar la violencia de género, para que ser un cobarde salga caro, para que estos burros sean lo que son y no sean humanos.

Y es que no tengo mucho que decir al respecto, solo quería soltar bilis después de ver lo que algunos HIJOS DE LA GRAN PUTA hacen a una MUJER. Solo quería decir eso mientras estoy escuchando a un maltratador arrepentido en la radio, fruto de la violencia que veía en su casa cuando era pequeño. Dice que estuvo en un centro de rehabilitación y bla, bla, bla... Esto tiene unos altos perfiles psicopatológicos, puede que se debiera trabajar con aquellos que desgraciadamente quedan vivos para poder cambiar su visión global con respecto a las mujeres.