martes, 15 de abril de 2008

Soy un reprimido

He descubierto que soy un carca de estricta moral y antiguas costumbres. Un amargado. Un reprimido. Hoy me han tocado la polla pero bien. Dejadme descargar mi rabia de forma desordenada.

Hablaba con uno de mis mejores amigos y me comentaba que se había liado con cierta chica el sábado, y que iban ambos un poco colocadillos. El caso es que el viernes habían vuelto a quedar, y el chaval andaba dilucidando entre si se la tiraba o no. Tras acordarme de su madre e insultarle repetidas veces, maldiciendo esta corrompida sociedad en que vivimos, me ha soltado varias pullitas que me han sentado fatal. No es que me oponga a que follen, me opongo a que follen sin sentir nada, solo por placer animal. Discutíamos, en fin, dos modelos de ver a las chicas. El suyo, que le da grandes resultados (aquí te pillo, aquí te mato y si te he visto no me acuerdo) y el mío, contínua fuente de fracasos (no tocar a una chica hasta tenerla atada y bien atada y sentir algo intenso por ella). Empezó el cruce de acusaciones ("¡Degenerado!", "¡Soso, vive la vida!", "Salido de mierda!", etc). Y me tocó los huevos pero bien tocados a decirme que lo que yo quería es casarme a los 16, y que no me iba a comer un rosco en la puta vida. Yo, poco dado a los insultos, enganché a ese mariconazo de ciudad y casi le descalabro, suerte que me dio un poco de pena. En fin, que nos enfadamos un rato, aunque nos hemos reconciliado (yo no sé si partirle la cara aún)

El caso es que me he puesto a reflexionar, y me he dado cuenta de la laxa moral que tenemos los jóvenes hoy en día. Aparte de ser una generación de ignorantes, alcohólicos y drogadictos vamos a ser una quinta de desenfrenados sexuales. Yo es que debo ser un carca, porque no veo normal que vayas a la discoteca y te líes con una sin conocerla. No veo normal que las supuestas parejas formales estén todo el día poniéndose los cuernos. No entiendo este gusto dle placer por el placer. A mí me asquea. Somos personas, coño. No animales. Hay que anteponer el respeto, la razón y el cariño a los impulsos sexuales. Cuando te enrollas con una por placer lo haces solamente pensando en tí. Cuando quieres a alguien ya piensas en los dos.

Me jode sobremanera que haya gente que esté sobando continuamente a las chicas, cogiéndolas del hombro, etc... Yo me sublevo ante todos esos moscones de mierda, y lo peor es que me parezco un amargado porque yo nunca toco a una chica a no ser que sea mi novia, me parece una falta de respeto y un ataque a su intimidad. Que vale, que es cogerla del hombro solo pero a mí todo lo que implique contacto físico me infunde gran respeto. Odio a los que solo aprecian el cuerpo y no el espíritu. Al decir eso soy un poco hipócrita, porque yo estoy profundamente enamorado de una chica a la que apenas conozco pero que me parece hermosísima. Creo que hay una diferencia, que es básicamente que no me la quiero tirar, pero no deja por ello de ser una extraña perversión.
Me reprochan que no sé tratar a las mujeres. Es que yo las trato como trato a los hombres, como personas, no como objetos. ¿Que eso no las pone? Me la suda, no voy a cambiar. Tengo principios y moral. Y me da igual no comerme un rosco en años, sé que al final tendré razón.

Y si no, me da igual.

Hijos de puta.